Qué hacer cuando el idioma se convierte en una barrera al momento de acudir a consulta médica en Australia

Doctor and senior patient discussing medical test results using digital tablet

Médico y paciente adulto mayor discutiendo los resultados de las pruebas médicas usando una tableta digital. Credit: Joos Mind/Getty Images

Get the SBS Audio app

Other ways to listen

En Australia muchas personas de comunidades multiculturales se enfrentan a la barrera del idioma al momento de acudir al médico. Esto tiene un impacto en la calidad del servicio que reciben y, por consecuencia, también en cómo enfrentan sus problemas de salud. En SBS Spanish consultamos con un médico de nuestra comunidad para saber cómo solventar estos inconvenientes.


A medida que la comunidad multicultural de Australia crece, la demanda de servicios también se incrementa. Y esto ha puesto de manifiesto la necesidad de apoyo con una perspectiva más diversa en algunas áreas como es la atención sanitaria.

Actualmente, existe la preocupación de que las comunidades multiculturales no están equitativamente respaldadas por Medicare a la hora de pagar una consulta médica con intérprete.

Al mismo tiempo, los médicos que atienden en clínicas familiares afirman que la financiación actual no cubre el tiempo que les gustaría dedicar a los pacientes cuya lengua materna no es el inglés, y que este importante servicio no es frecuentemente contemplado en los seguros médicos de los estudiantes internacionales.

La falta de dominio del inglés, cuanto se asiste a la consulta médica, plantea también limitaciones en situaciones relacionados con violencia doméstica.

En entrevista con SBS Spanish, el médico general en Melbourne, Andrés Acosta Rippe, confirma que la barrera del idioma crea situaciones poco positivas respecto al tiempo y la atención que se le puede dedicar a un paciente en Australia.

Lo que me he dado cuenta es que siempre es más fácil hablar con los pacientes en su idioma nativo, bien sea inglés o español.
Dr. Andrés Acosta Rippe, médico general en Melbourne

“He tenido la oportunidad de ver pacientes que hablan otros idiomas y a veces es un poco complicado. Facilita mucho cuando hay una persona que logre traducir bien, sea algún acompañante o los servicios que ofrece el gobierno para traducción”, comenta el médico general.

Por su parte, el doctor Bruce Willett, del Colegio Real Australiano de Médicos Generales (RACGP, siglas en inglés), afirma que hay una gran demanda de servicios de interpretación telefónica durante las consultas con los médicos de familia.

"Del 20 por ciento de personas que hablan otro idioma. En Australia hay 400 idiomas diferentes, por lo que un servicio telefónico es realmente la única forma práctica de solucionarlo", asegura el doctor Willett.
La doctora Astrid Perry, del Servicio Internacional de Asentamiento, señala que no contar con un servicio de intérprete a la hora de comunicar una situación de salud al médico general, puede generar interpretaciones equivocadas de ambas partes; sobre todo en el ámbito de la salud mental “porque en muchas culturas se utiliza una especie de sinónimo, en lugar de decir directamente cómo te sientes”.

Para los pacientes que son refugiados y están en Australia con visados temporales, la preocupación es que, aunque puedan encontrar un médico que hable su idioma o tengan acceso a intérpretes, no siempre pueden permitirse ver a un médico.

"Algunos lo hacen si tienen Medicare. Hay una serie de visados temporales que sí tienen Medicare y entonces tienen que pagar el excedente como todos los demás, cuando hay excedente. Los que no tienen Medicare, como los estudiantes internacionales, por ejemplo, se supone que tienen su propio seguro que cubre su atención médica. Aunque sabemos que no siempre es así, ya que tienen un presupuesto muy ajustado", confirma la doctora Perry.

En el caso de los que están totalmente cubiertos por Medicare, los médicos critican el apoyo que el sistema ofrece a las comunidades multiculturales, ya que no hay ninguna partida en la escala de selección de Medicare que atienda específicamente a los pacientes que necesitan interpretes.

Los pros y contras de solicitar un interprete

El Colegio Australiano de Médicos Generales dice que, aunque hay una cobertura extra cuando es necesaria una consulta más larga con un intérprete, no parece ser suficiente para alcanzar la comprensión que se necesita tanto por parte del paciente, como del médico.

El doctor Bruce Willett dice que el propio Medicare no se ha mantenido al día con la inflación o la demanda, y que son los pacientes más vulnerables los que corren el riesgo de quedarse sin nada.

"Los médicos de cabecera han sido exprimidos. O bien tienen que ver a los pacientes más rápidamente para intentar llegar a fin de mes -lo que, por supuesto, hace que cosas como el tratamiento de personas que tienen el inglés como segunda lengua o no hablan inglés en absoluto sean más difíciles en ese espacio de tiempo- o los médicos de cabecera se ven obligados a abandonar la facturación que se conoce como como bulk billing".
Para el médico general Andrés Acosta lo ideal es organizar la ayuda de un interprete antes de acudir a la cita médica, aunque reconoce que a veces esto ocasiona que la consulta sea un poco más larga.

Yo pienso que vale la pena usar un interprete. Es un servicio que ofrece el gobierno y está muy claro todo respecto a la confidencialidad.
Dr. Andrés Acosta Rippe, médico general en Melbourne

"Lo ideal es que el doctor ya sepa que el paciente necesita un interprete, y el interprete ya esté contactado por parte de recepción… La idea es que cuando comience la cita ya esté una persona en la línea telefónica”, comenta el especialista.

Sobre si es mejor que el intérprete sea un familiar o un conocido, el doctor Acosta opina que a veces es mejor, porque el paciente se puede sentir más cómodo. Pero advierte que esta opción también tiene sus inconvenientes.

Yo soy partidario de que los pacientes entren acompañados en la medida que ellos se sientan cómodos. Pero muchas veces hay temas de violencia doméstica o sexuales, ginecológicos, que a veces los pacientes no quieren que su pareja o su acompañante conozcan. Entonces, ellos deben avisarle al médico cuando no desean que estos temas sean tratados.
Dr. Andrés Acosta Rippe, médico general en Melbourne

El doctor Acosta agrega que a veces hay pacientes que son víctimas de violencia doméstica y acuden a la cita con el victimario o victimaria y ésta persona trata de manipular la información.

“En estos casos yo recomiendo que sea mejor con una tercera persona que no conozca el paciente, que sea un intérprete y que se haga a puerta cerrada… Al final del día quien decide si quiere estar acompañado o no durante la consulta es el mismo paciente”, agrega el doctor Acosta.

Presiona en el icono que se encuentra debajo del título de este artículo para escuchar el informe completo.

Share