Laborismo condiciona apoyo a recorte de impuestos

Tax Cut

Shadow Treasurer Jim Chalmers and Opposition leader Anthony Albanese speak in Melbourne. Source: AAP

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El laborismo federal se ha negado a apoyar el paquete completo de recortes de impuestos de la coalición, insistiendo en que quiere cambios en el plan del gobierno a cambio de su apoyo.


La coalición ha estado presionando al Partido Laborista para que respalde sus recortes de impuestos sobre la renta de 158.000 millones de dólares en tres etapas desde que ganó las elecciones el mes pasado.

El líder laborista Anthony Albanese dijo que su gabinete en la oposición acordó hoy apoyar las dos primeras etapas del plan de impuestos, que inmediatamente recortaría los impuestos para los trabajadores de bajos y medianos ingresos.

Albanese dijo que deseaba que la coalición aumentara el umbral para la segunda fase de la reducción de impuestos, de 90.000 dólares a 120.000 dólares, y que llevara a cabo el cambio antes de lo previsto.

Dijo además que el cambio ayudaría a estimular la economía.

La coalición ha dicho repetidamente que quiere que su paquete fiscal completo sea aprobado por el Parlamento cuando se reanude y hasta ahora se ha negado a aceptar dividir la legislación en partes.

Pero el líder de la oposición dijo que el Partido Laborista no estaba dispuesto a apoyar la tercera etapa del plan, que no entraría en vigor sino hasta 2024-25.

Dijo que el Parlamento debería aprobar inmediatamente las dos primeras etapas y debatir la tercera parte en una fecha posterior.

La primera etapa del plan fue la pieza central del presupuesto de abril de la coalición, lo que significaría que las personas que ganen hasta $126.000 este año fiscal recibirán $1.080 de vuelta en el momento de los impuestos.

La tercera etapa del plan fiscal tiene por objeto reducir la tasa impositiva al 30% para las personas que ganan entre 45.000 y 200.000 dólares.

El gobierno necesita el apoyo del Partido Laborista o de la bancada cruzada para aprobar la legislación de recorte de impuestos en el Senado.

El Laborismo también quiere que el gobierno acelere los proyectos de infraestructura para ayudar a estimular la economía.

Los políticos regresarán a Canberra la próxima semana para la primera semana de sesiones desde que la coalición ganó las elecciones federales en mayo.

Sólo se sentarán durante tres días, y se espera que los dos primeros se ocupen de las ceremonias de inauguración del nuevo Parlamento y de la conmemoración del ex primer ministro Bob Hawke.

Albanese dijo que el Partido Laborista ayudaría a la coalición a aprobar las dos primeras etapas del plan fiscal en el Parlamento el jueves a cambio de que se aplace la tercera etapa.

Si el plan fiscal no se aprueba la próxima semana, la coalición tendrá que esperar otra semana antes de intentarlo de nuevo cuando el Parlamento se reúna el próximo 22 de julio.

Recordemos que el año pasado, el Parlamento aprobó un recorte de impuestos de $530 para las personas que ganan hasta $90,000 este año fiscal.

En la primera fase del nuevo plan fiscal se duplicaría la reducción de impuestos para el año fiscal en curso.

La oficina de impuestos - ATO por sus siglas en inglés- pagará retrospectivamente a las personas si completan una declaración de impuestos 2018-19 antes de que el cambio se convierta en ley.

Conversamos con el economista en Melbourne, Jorge Fallas. 


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