Las tasas de interés récord anunciadas el martes pueden ser buenas noticias para los titulares de hipotecas y para aquellos que buscan entrar en el mercado inmobiliario.
Pero es un golpe para los australianos mayores que dependen de los intereses de sus ahorros.
Los constructores están aplaudiendo el recorte de la tasa de interés, que vino junto con medidas federales para la recesión de COVID como la subvención de 25 mil dólares para la construcción de viviendas.
Los precios de las propiedades pueden haber subido, pero no se está comprando mucho más, con las tasas de ahorro australianas por las nubes.
Así que, ¿el recorte de la tasa de efectivo y la flexibilización cuantitativa harán lo que se pretende e impulsarán la inversión empresarial y, con suerte, los empleos?
Si los prestatarios son los ganadores, los perdedores son los ahorradores, incluyendo muchos jubilados que dependen de los ingresos por intereses.
Sobre el impacto de esta medida, conversamos con el economista en Sídney, Charlie Ríos.
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