Quarantine Services Australia (QSA) fue registrada oficialmente como empresa el 30 de agosto por el exdirector adjunto del Partido Liberal de Nueva Gales del Sur, Scott Briggs, quien también es el presidente de la conferencia electoral federal de Scott Morrison en su electorado de Cook en Sídney, informó la ABC.
Según la cadena de noticias, el departamento de Asuntos Internos otorgó $79.500 dólares a otra empresa vinculada a Briggs, DPG Advisory Solutions, dos semanas antes de la registración de QSA, bajo un contrato de "licitación limitada" para proporcionar "servicios de consultoría" para ayudar a desarrollar la propuesta.
La que esta semana QSA distribuyó un folleto en el cual confirma que "Asuntos Internos contrató a DPG para ayudar a facilitar una plan de cuarentena privada liderado y financiado por la industria en línea con la política del Gobierno de la Commonwealth".
"QSA se establece como una entidad sin fines de lucro basada en el principio de reciprocidad", explica el folleto de la empresa.
"QSA fue establecida como un servicio de cuarentena privada financiado por el usuario con una capacidad de procesar hasta 80.000 trabajadores extranjeros calificados al año, junto con un número similar de titulares de visas de estudiante, en instalaciones que cumplen con los requisitos de cada gobierno estatal y territorial a lo largo y ancho de Australia".
Bajo las restricciones fronterizas actuales por COVID-19, solo un número limitado de trabajadores extranjeros completamente vacunados puede ingresar al país con una exención de la Commonwealth, pero en algunos estados las personas que llegan del extranjero todavía deben observar una cuarentena.
File photo of passengers at Brisbane Airport Source: AAP
QSA propone facilitar la entrada a Australia a miles de extranjeros mediante un esquema de cuarentena privada que ofrecerá desde "alojamientos austeros" hasta "alojamientos en hoteles" de categoría superior.
El precio de QSA para una cuarentena puede costar $ 12,500 para períodos completos de 14 días, o entre $ 2,700 y $ 4,700 para cuarentenas más cortas de tres días.
Durante la fase final del plan de reapertura de fronteras al mundo, respaldado por el Gabinete Nacional, Australia limitará sus requisitos de cuarentena solo a los "viajeros que llegan de países donde COVID representa un alto riesgo".
Un portavoz del Departamento del Interior dijo a la ABC que es crucial para Australia facilitar un mayor movimiento de viajeros para permitir el regreso de australianos en el extranjero y “para responder a la escasez de mano de obra crítica que afecta la economía de Australia".
"DPG se comprometió a apoyar al departamento en la gestión de la cuarentena para trabajadores calificados, mano de obra agrícola, estudiantes de educación terciaria y otros grupos a lo largo del tiempo, ayudando así a reducir el impacto en la capacidad de cuarentena estatal y territorial".
DPG Advisory Solutions fue fundada y dirigida por el ex candidato del Partido Liberal David Gazard, quien anteriormente trabajó como asesor ministerial y periodista de la Coalición y también es uno de los hombres de confianza del primer ministro australiano.
La compañía es una de las varias empresas especializadas en ejercer presión en Canberra.
Prime Minister Scott Morrison drives a hydrogen-fuelled car around a Toyota test track in Melbourne. Source: AFP
El mes pasado se informó a un comité del Senado que el Departamento de Asuntos Internos se había reunido con Briggs y Gazard al menos una docena de veces durante agosto y septiembre para discutir la propuesta de QSA.
En la actualidad, el único funcionario empleado por QSA es David Saul, que solía ser el director ejecutivo y director general de Paladin Australia mientras prestaba "servicios de seguridad privados" en la isla Manus, en Papúa Nueva Guinea en virtud de un controvertido contrato con el Departamento del Interior.
QSA también ha contratado a la compañía de salud Aspen Medical, con sede en Canberra, que ya ha recibido más de $ 1 mil millones en contratos relacionados con la pandemia de COVID-19 del gobierno federal, para supervisar el sistema de cuarentena y pruebas para detectar el coronavirus.
La portavoz de Asuntos Internos para el partido laborista, Kristina Keneally, describió a la empresa QSA como un emprendimiento para repartir "dinero entre amigos" donde existen claros conflictos de intereses.
Labor Senator Kristina Keneally Source: AAP Image
"¿Cómo es posible que los dos mejores amigos del primer ministro sean las únicas dos personas a las que el Departamento del Interior se ha acercado para establecer un sistema de cuarentena privada financiado por el usuario?"
La oficina de Morrison insiste en que el Primer Ministro no está involucrado en la propuesta de QSA, y que está siendo manejada en su totalidad por el Departamento de Asuntos Internos.
Fuente ABC
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