Trabajador de un hotel de cuarentena en Melbourne con COVID-19 pone en alerta a Australia

El gobierno del estado de Victoria restableció algunas restricciones tras detectarse que un trabajador de un hotel de cuarentena en la ciudad de Melbourne dio positivo a COVID-19.

Victorian Premier  Daniel Andrews

Victorian Premier Daniel Andrews Source: AAP

Un hombre de 26 años que trabaja en un hotel de cuarentena en Melbourne dio positivo a COVID-19, lo que ha llevado al gobierno del estado de Victoria a introducir nuevamente el uso obligatorio de mascarillas en espacios interiores y a reducir el número de personas que pueden reunirse de forma privada. 

En la noche del miércoles, las autoridades sanitarias de Victoria anunciaron este caso, en momentos en que Victoria llevaba 28 días sin contagios locales, y aseguraron que los equipos de salud pública estaban investigando el caso y que se estaba notificando a los contactos cercanos. 

Más tarde, el premier de Victoria, Daniel Andrews, dijo que el nuevo caso correspondía a un hombre de 26 años de Noble Park, en el sureste de Melbourne, que había estado trabajando como trabajador de apoyo residente en el marco del programa de cuarentena del Open de Australia. 

Su infección ha provocado alertas en los lugares de exposición de Noble Park, Brighton, Springvale, Keysborough, Brandon Park y Heatherton. 

Asimismo, centenares de tenistas y acreditados al Abierto de Australia han sido aislados, sometidos a pruebas de COVID-19, hasta que den negativo y los partidos de este jueves en Melbourne, donde se desarrollan seis torneos preparatorios para el Open de Australia, que debe comenzar el lunes, han sido anulados.


Puntos destacados: 

  • Un hombre de 26 años de Noble Park, en el sureste de Melbourne, que había estado trabajando como trabajador de apoyo residente en el marco del programa de cuarentena del Open de Australia, dio positivo a COVID-19.
  • Victoria llevaba 28 días sin casos de COVID-19.
  • Con un caso de COVID-19, el gobierno de Victoria introdujo restricciones sociales y el uso de la mascarilla en espacios interiores, pero no ordenó ningún confinamiento como lo hizo con una infección el gobierno de Australia Occidental-
  • Melbourne fue el epìcentro de la segunda ola de COVID-19 en Australia, que se detectó en junio pasado y que disparó las cifras de infecciones y fallecidos, por fallos en la cuarentena para viajeros internacionales en hoteles de esta ciudad. 

Reitroducción de medidas contra la COVID-19

Andrews dijo que el estado también volverá a las restricciones anteriores por coronavirus a partir de las 23.59 horas del miércoles: 

  • Las reuniones en las viviendas tienen un límite máximo de 15 personas,
  • Los habitantes de Melbourne deben de forma obligatoria mascarillas faciales en los espacios públicos interiores.
  • El tope del 75% del personal en las oficinas programado en el retorno a los centros de trabajo el próximo 8 de febrero quedará en suspenso, y se mantendrá el tope actual del 50%. 
"Este es un caso. No hay necesidad de que la gente entre en pánico", recalcó Andrews, quien a diferencia de su homólogo de Australia Occidental, Mark McGowan, no confinó a la ciudad por una sola infección como lo hizo en Perth, que al no registrar ningún contagio saldrá del estricto confinamiento de cinco días este viernes.

"Todos estamos bien formados y educados en lo que hay que hacer como Estado. Pero tenemos que tomarnos esto en serio"., precisó Andrews al referirse a las experiencias que ya aprendió su gobierno tras el estallido de casos en junio pasado por fallos en las cuarentenas de los hoteles para viajeros internacionales que provocaron miles de infecciones y centenares de muertes, especialmente de ancianos.

El siguiente brote en Victoria, provocado por las infecciones a mediados de diciembre en Sídney, fueron controladas a tal punto que el virus fue eliminado y el estado cumplió el miércoles 28 días sin contagios locales, una racha que rompió cuando el trabajador dio positivo a COVID-19.
Conferencia de prensa del Premier de Victoria, Daniel Andrews, sobre nuevas restricciones para prevenir un nuevo brote... Posted by SBS Spanish / Australia en español on Wednesday, 3 February 2021

Esclarecer la infección

El premier de Victoria indicó que se desconoce cómo se infectó el hombre, así como aún no se tiene información sobre la cepa del virus había contraído. 

El trabajador, cuya identidad se desconoce, ha sido trasladado a un hotel sanitario y sus contactos cercanos se están aislando. 

La última vez que trabajó en el Grand Hyatt fue el 29 de enero, cuando se sometió a la prueba del COVID-19 y dio un resultado negativo, sólo para desarrollar posteriormente los síntomas y someterse de nuevo a la prueba. 

La noticia se conoció el miércoles por la noche, cuando las autoridades de Victoria investigaban un posible caso de transmisión de COVID-19 entre huéspedes en cuarentena en el hotel Park Royal de Melbourne. 

Dos grupos distintos de huéspedes en habitaciones contiguas del hotel han dado positivo en la variante más infecciosa del coronavirus B117, detectada por primera vez en el Reino Unido. 

La ministra de Policía de Victoria, Lisa Neville, responsable de supervisar el renovado programa de cuarentena de los hoteles, dijo que los análisis genómicos habían demostrado que las infecciones eran idénticas. 

"Eso significa que es como si hubieran estado juntos en la misma habitación", dijo a los periodistas a primera hora del miércoles. 

Uno de los grupos, una familia de cinco miembros ahora infectados por el virus, llegó de Nigeria el 20 de enero y dio positivo cuatro días después. 

Una compañera de viaje en una habitación adyacente, que reinició su cuarentena de 14 días tras la llegada de su marido el 16 de enero, dio dos veces negativo antes de dar positivo el 28 de enero. 

Las autoridades aún desconocen cómo se infectó esta mujer de 60 años, ya que los hisopos del tercer y undécimo día de su compañero dieron negativo. 

Neville dijo que se habían revisado las imágenes de seguridad del exterior de las habitaciones, y que no había ningún indicio de que las familias o el personal hubieran incumplido los protocolos durante su estancia. 

"La carga viral en la habitación de la familia de cinco personas... era tan alta que incluso al abrir la puerta para recoger su comida el virus ha llegado al pasillo", dijo la ministra. 

"Esa es la hipótesis de trabajo. No ha habido absolutamente ningún niño corriendo por los pasillos o movimiento entre las habitaciones en absoluto". 

La mujer infectada recuerda haber abierto su puerta al mismo tiempo que la habitación de al lado, pero no ha podido precisar la fecha ni la hora exactas. 

La subdirectora de Sanidad, Melanie Van Twest, dijo que las autoridades creen que la posible fuga de la habitación se debió a que alta carga de infección colectiva de la familia en combinación con la potente variante británica. 

Las autoridades también revisarán el sistema de ventilación del hotel, aunque Neville señaló que un informe anterior había encontrado que no se estaba compartiendo aire entre las habitaciones o en los espacios comunes. 

"Es poco probable que haya sido el sistema de ventilación en este caso", dijo.

Potencial transmisión por aerosol

Michael Toole, profesor de salud internacional del Instituto Burnet dijo en un artículo publicado el 2 de febrero en la revista The Conversation que las autoridades tienen “una resistencia obstinada a tomar en serio la transmisión por aerosol”.

El experto argumenta que en mayo varios empleados de hoteles y guardias de seguridad de cuarentenas dieron positivo a la COVID-19, desencadenando la segunda ola en Australia.

Las pruebas genómicas mostraron que el 99% de la segunda ola de casos de COVID-19 en la comunidad de Victoria procedía de eventos de transmisión relacionados con viajeros que regresaron y que infectaron a personas que trabajaban en los dos hoteles.

También explica que en los últimos tres meses, Australia ha visto infracciones de la cuarentena hotelera en Adelaida, Sídney, Brisbane y ahora Perth.

“Los breves y duros cierres detuvieron la propagación del virus en Adelaida y Brisbane, aunque los brotes de Sydney continuaron durante un mes, con un total de unos 180 casos. Perth ha entrado en un cierre disruptivo, provocado por un guardia que se infectó en un hotel de cuarentena del CBD y que luego visitó más de una docena de lugares en toda la ciudad, incluyendo, según se informa, otros trabajos de seguridad ocasionales”.

Toole remarca que Australia no ha aprendido las lecciones y que se debería implementar urgentemente “una estrategia nacional de cuarentena hotelera coordinada y estandarizada.”. 

Los elementos clave del sistema de Victoria que podrían servir de base a las normas nacionales son, según el experto: 

  • un alto nivel de atención a los sistemas de ventilación en hoteles y vehículos de transporte
  • todo el personal está contratado por un organismo del gobierno central y tiene prohibido tener un segundo empleo
  • todo el personal que tenga un contacto estrecho con un huésped infectado o con cualquier persona que pueda estar infectada debe llevar un EPI adecuado, incluida una mascarilla respiratoria
  • todo el personal se somete diariamente a una prueba de PCR
  • los huéspedes del hotel no pueden salir de su habitación por ningún motivo.
 Todavía no está claro cómo se infectó el guardia de seguridad de Perth. Trabajaba en la misma planta que los huéspedes en cuarentena, pero al parecer no entraba en sus habitaciones. 

“Pero independientemente de los detalles específicos de este caso, la atención a la ventilación y el EPP adecuado es más importante que nunca, dado el creciente conjunto de pruebas de que el coronavirus puede propagarse a través de pequeñas partículas (aerosoles)”, indicó.

Toole remarcó que “el guardia de seguridad de Adelaida y el limpiador del hotel de Brisbane se infectaron casi con toda seguridad a través de aerosoles, al igual que el conductor de un autobús de Sydney para el personal de vuelo, indicó este académico en salud internacional”.

Con información adicional de The Conversation.



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Published 4 February 2021 9:26am

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