Un sondeo de Sky News-ReachTel reveló que alrededor del 60 por ciento en el electorado de Longman, en Queensland, y Braddon, en Tasmania, consideran que los solicitantes de asilo y refugiados que se encuentran en los centros de Nauru y la isla papú Manus no deberían ser acogidos en Australia.
El ministro del Interior, Peter Dutton, comentó que los fuertes niveles de apoyo no deberían sorprender porque la política de la protección de fronteras fue un asunto de suma importancia en los últimos comicios.
“La gente votó por los laboristas pensando en que iban a tener la misma política de protección de fronteras que la coalición y ese no es el caso”, dijo Dutton el lunes a Sky News.
“Estamos viendo al Partido Laborista en medio de una guerra civil, hay posiciones que se toman a favor y principalmente en contra. La política del gobierno ha detenido a los barcos y ha sacado a los niños de los centros de detención”, agregó.
La opinión pública de Australia está dividida respecto a la acogida de los refugiados al país a nivel nacional dado que un 45 por ciento apoya esa propuesta mientras que otro 47 por ciento se opone.
A nivel nacional, un 60 por ciento de los electores apoya un límite de 90 días de detención para los solicitantes de asilo.
El Partido Laborista debatirá la problemática de los solicitantes de asilo en su conferencia nacional de diciembre próximo, en donde se incluirá el borrador de la propuesta para asegurar que la detención de los inmigrantes indocumentados no supere los 90 días.
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