La flexibilización de las restricciones fronterizas internacionales para los titulares de visas, prevista para este miércoles 01 de diciembre, se ha pospuesto por dos semanas, a medida que el gobierno australiano busca obtener más información sobre la nueva variante Ómicron de COVID-19.
La medida, anunciada el lunes por la noche y apoya en la recomendación del director médico de Australia, Paul Kelly, hará que la reapertura de Australia a los titulares de visas de trabajo calificado y de estudiante, así como a los titulares de visas humanitarias, de visas de vacaciones laborales y de visas provisionales de familia, se retrase hasta el 15 de diciembre.
La reapertura a los viajeros de Japón y Corea del Sur también se detendrá hasta el 15 de diciembre.
"La pausa temporal garantizará que Australia pueda recopilar la información que necesitamos para comprender mejor la variante de Ómicron, incluida la eficacia de la vacuna, la variedad de enfermedades, incluso si puede generar síntomas más leves y el nivel de transmisión", se señala en el documento emitido por el gobierno.
Puntos destacados:
- Trabajadores calificados, estudiantes internacionales y otros titulares de visas tendrán que esperar hasta el 15 de diciembre para poder visitar Australia.
- La medida de emergencia se creo para dar tiempo al gobierno australiano a que recopile más información sobre la nueva variante Ómicron de COVID-19.
- No hay evidencia de que las vacunas COVID-19 sean menos efectivas contra la variante Ómicron.
El primer ministro australiano, Scott Morrison, convocó una reunión del gabinete nacional para el martes para discutir más a fondo la variante Ómicron y la respuesta de Australia.
"Los australianos pueden estar seguros de que estamos en una posición sólida para lidiar con COVID y sus desafíos emergentes", se señala en el comunicado del gobierno.
“Continuaremos tomando acciones sensatas y receptivas basadas en evidencia, dirigidas por expertos médicos. Esto garantizará que podamos abrir de forma segura y permanecer abiertos de forma segura mientras aprendemos a vivir con el virus".
De acuerdo con el comunicado, la Fuerza Fronteriza de Australia mantendrá la discrecionalidad para permitir que las personas que ya están en tránsito ingresen a Australia, pero estarán sujetas a los requisitos de aislamiento del estado o territorio donde se encuentren.
Todas las personas que lleguen del exterior a Nueva Gales del Sur y Victoria deben ponerse en cuarentena en casa durante 72 horas. En otros estados, se requieren 14 días de cuarentena hotelera y existen acuerdos sobre límites de viajeros.
El fin de semana el gobierno prohibió temporalmente la entrada a Australia a los no ciudadanos de nueve países del sur de África, aunque las islas de la republica de Seychelles ya han sido eliminada de esa lista.
Más temprano el lunes, el ministro de Salud, Greg Hunt, dijo que había pedido al Grupo Asesor Técnico Australiano sobre Inmunización que revisara los consejos de salud sobre los refuerzos de vacunas a raíz de la aparición de la variante Ómicron.
"Nosotros... les permitiremos actuar de forma independiente y continuaremos siguiendo sus consejos, pero estamos preparados con suministros", dijo Hunt a los periodistas el lunes.
"Ya somos una de las primeras naciones del mundo, después de Israel, en tener un programa de refuerzo para toda la nación. Si recomiendan cambios, los seguiremos".
Para ser elegible para una vacuna de refuerzo de COVID-19, la persona debe tener 18 años o más y haber recibido una segunda dosis de COVID-19 hace al menos seis meses.
El Reino Unido ya ha adelantado la elegibilidad para las vacunas de refuerzo a cinco meses después de la segunda dosis de una vacuna COVID-19, en un esfuerzo por acelerar el programa.
Australia revisará el marco temporal del refuerzo en medio de la propagación de Ómicron
El profesor Kelly dijo a los periodistas que no había evidencia de que las vacunas COVID-19 sean menos efectivas contra la variante Ómicron.
"No tenemos evidencia de eso y Pfizer y Moderna pueden actuar rápidamente si eso sucediera, para hacer una vacuna específica. Esa es una gran ventaja", dijo.
Hunt dijo que había hablado con los directores ejecutivos de Pfizer y Moderna Australia en las últimas 24 horas.
"Confirmé que, como nuestro contrato ya se había preparado para las variantes, si había un requisito para un cambio, están listos y nosotros estamos listos", señaló.
"Y ambos han dicho: 'Sí, eso es exactamente como se establece en el contrato'".
